domingo, 13 de marzo de 2011

...llorando a la luz de las estrellas



Por la lejana montaña

va cabalgando un jinetevaga solito en el mundo
y va deseando la muerte

Lleva en su pecho una herida
va con su alma destrozada
quisiera perder la vida
y reunirse con su amada
La quería mas que a su vida
y la perdió para siempre
por eso lleva una herida
por eso busca la muerte


Después se pierde en la noche
y aunque la noche es muy bella
el va pidiéndole a Dios
que se lo lleve con ella
La quería mas que a su vida
y la perdió para siempre
por eso lleva una herida
por eso busca la muerte.
Bunbury-El jinete.

Aséptico.



"Te estoy buscando en este inmeso vacío. Grito, grito tu nombre hasta desgarrar mi garganta, hasta que la impotencia y la desesperanza me invaden de nuevo, y vuelvo a caer en esa espiral. Bendita espiral de escepticismo y lágrimas. Bendito sosiego de esta alma atormentada en un remolino de sentimientos encontrados. Pero despues de la calma, viene el frío nihilismo en el que me encuentro. Donde ya Nada vale Nada."

Que triste es darse cuenta de que no le importas a nadie (fuera del núcleo familiar,claro está). Realmente nadie te quiere conocer, si, a ti. Simplemente eres un@ más. Un cuerpo entre cientos, que está de paso en esta soledad de multitudes. Donde prima el individualismo y el egoísmo. No hay una sola persona que se pare a pensar en ello (ni se parará). Y si se para, no hará nada. Comprensible.


Siguiendo a Hegel y para cerrar estos pensamientos quiero hacer referencia a su ensayo sobre la "muerte del Arte",he de decir que en el Siglo XXI estamos viviendo la "muerte del Amor". Entiéndase Amor en el sentido
completo de la palabra.